La elección del color Mandarina o más exactamente Tangerine Tango como color del Año 2012, como os explicaba la semana pasada, me animó a acabar este quilt, que incluye precisamente toda una gama de tonos naranja, mandarina, melocotón, mezclados con tonos violetas, malvas, prunas. ¿Qué presciencia, no, haber elegido precisamente estos colores hace 2 meses? Ha ha! Pura casualidad, sencillamente me gustan estos colores y me inspiraron las telas estampadas Andover Outfoxed con zorros y erizos.
Aquí está «Fábula» acabado, por fin, aunque le falte más acolchado, a máquina en círculos grandes. O quizá a mano con algodón perlé.
Es un proyecto de patchwork creativo y divertido, no se repiten bloques sino que se hace una composición completa para todo el quilt. En el patrón, el principio de composición y la técnica de construcción están claramente explicados, dejando libre elección de seguir el modelo o de crear una composición propia. El tamaño es fácil de adaptar, y es muy versátil, funciona bien con muchos tipos de estampados o de batiks, e incluso con telas lisas.
Nota técnica: el uso del color naranja en patchwork
El naranja es un color fantástico para despertar un quilt, aunque muchos quilters no se atreven a incluirlo en un quilt por medio a que dañe la vista de quién lo mira. Esto no es claramente mi caso, al repasar mis archivos me di cuenta con sorpresa que una buena mitad de mis creaciones en patch incluyen el color naranja! El segundo color que más uso es el verde. O sea, colores simbólicamente opuestos, hum…
El truco es usar el color naranja como acento, es decir en pequeñas dosis, y sobre todo, cuidar de bien repartir estos pedazos de tela viva por toda la superficie del top. El color naranja tiene una particularidad que explicaré la próxima vez si os interesa la teoría del color.
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